Todos queremos bajar nuestra factura energética. Pero continuamente nos bombardean con anuncios de que debemos hacer esto y no lo otro. Esto puede llegar a ser confuso y crearnos dudas.

También puede ser costoso, porque si necesitas gastar un poco de dinero para reducir los costos, sin duda deseas asegurarte de que los ahorros valgan la pena después de que se haya terminado el trabajo. Porque muchas veces te vas a gastar más de lo que vas a llegar a ahorrar.
En Comercial Foisa queremos ayudarte a tomar las decisiones energéticas más optimas y beneficiosas para tu bolsillo. “Tu hogar depende de diferentes sistemas energéticos durante todo el año para mantener a la familia cómoda, por lo que es importante tener una visión objetiva del consumo de energía de tu hogar cada temporada”
Más de la mitad del consumo de energía típico de una casa
proviene de la calefacción y del aire acondicionado, es lo primero que
debemos analizar en consumo para empezar a ahorrar. La tecnología siempre
está cambiando y hay nuevos aparatos y sistemas disponibles que pueden ayudar a
los propietarios a administrar el consumo de energía durante todo el día y
ahorrar consumo y dinero.
Consejos de ahorro energético que realmente reducen la factura:
Mejora el aislamiento de paredes y ático
Un ático adecuadamente aislado puede ahorrar entre un 10 y un 50 por ciento de la factura de calefacción. Y en las estaciones más cálidas, el mismo aislamiento ayuda a estabilizar las temperaturas interiores para mantener tus necesidades de refrigeración más bajas.

Estos son algunos consejos que debes considerar al analizar tu aislamiento:
- Asegurarnos de utilizar un aislamiento alto, como espuma en aerosol, en las paredes exteriores y en los techos altos para obtener más aislamiento con menos espesor.
- Asegúrate de que el ático tenga barreras de aire, tales como deflectores de viento a lo largo de todo tu alero, para garantizar un flujo de aire adecuado. La ventilación ayuda a controlar la humedad, lo que a su vez ayuda a reducir las facturas de refrigeración durante el verano.
Tener tu vivienda sellada profesionalmente contra el aire
Todos sabemos que debemos cerrar las ventanas después de encender nuestro aparato de aire acondicionado. Pero tu hogar puede perder energía de forma mucho menos obvia, y eso es, en última instancia, un gasto para tu bolsillo porque estás pagando más energía de la que necesitas.
El sellado de aire ayuda a reducir el movimiento de aire dentro y fuera de la vivienda, lo cual es clave para crear una casa que ahorre energía. Sellar las fugas de aire puede resultar un ahorro de energía de hasta el 30%

La fuga de aire ocurre cuando el aire exterior ingresa a una casa a través de grietas y aberturas no descubiertas. Encontrar las manchas y luego sellarlas adecuadamente puede reducir significativamente los costos de calefacción y refrigeración, mejorar la durabilidad del edificio y crear un ambiente interior más saludable.
Un buen punto de partida para determinar si una fuga de aire está ocurriendo en tu hogar y en qué medida es mediante una auditoría de energía. Una auditoría de energía profundiza en los detalles de tu hogar y tu consumo de energía, utilizando una variedad de pruebas y preguntas.
En algunos países, las empresas locales de servicios públicos realizan una auditoría de energía. Las empresas profesionales también realizan auditorías.
Mientras tanto, puedes hacer algunas comprobaciones tú mismo. Solo colocando la mano en el lugar que sospechas y mirar si sientes el aire fresco o caliente, dependiendo de la temperatura exterior. O coloca una hoja de papel. Si se mueve, tienes una fuga.
Estos son algunos de los lugares más obvios para buscar fugas de aire en tu hogar:
- Enchufes eléctricos
- Interruptor de placas
- Marcos de puertas y ventanas
- Entradas del servicio eléctrico y de gas
- Zócalos
- Alrededor de las puertas
- Amortiguadores de chimenea
- Escotillas de ático
- Aires acondicionados de pared o ventana
- Televisión por cable y líneas telefónicas
- Donde los respiraderos de aire pasan a través de las paredes
- Ventilaciones y ventiladores
Reemplaza tus viejos sistemas de calefacción (especialmente hornos)
Si eres dueño de un horno o sistema de caldera que tiene más de 10 años, es muy probable que estés perdiendo dinero.
Los sistemas de hornos y calderas más antiguos tenían eficiencias en el rango de 56-70%. En contraste, los sistemas de calefacción convencionales modernos pueden alcanzar eficiencias de hasta el 98.5%, lo que significa que convierten casi todo el combustible que estás comprando en calor útil para tu hogar.
Renovar una caldera que está funcionando al 56% a una con un rango de eficiencia del 90% puede ahorrarte mucho dinero a final de año.
Tu sistema de calefacción y aire acondicionado es el mayor consumidor de energía de tu hogar. Un nuevo sistema de calefacción y aire acondicionado de alta eficiencia pueden generar por sí mismo ahorros de energía en un período de tiempo relativamente corto.
Apagar los aparatos cuando no están en uso
Nuestros dispositivos consumen energía incluso cuando pensamos que están “apagados”. Sin embargo, es posible que no nos demos cuenta de cuántos de nuestros aparatos consumen energía constantemente a la vez.
Un hogar promedio tiene 40 aparatos que consumen energía constantemente. Si bien algunos de ellos pueden parecer insignificantes como la cantidad de energía que consume un televisor o una cafetera programada para preparar el café por la mañana, cuando se suman, estos dispositivos pueden representar hasta el 10 por ciento de la energía del hogar.

Los
mayores consumidores de energía fantasma incluyen cualquier dispositivo
con control remoto (piensa en TV, reproductor de DVD o el
control remoto de las puertas de garaje); una fuente de alimentación
externa, el enchufe de tu enrutador, impresora, un cargador de cualquier
tipo (teléfono celular, tableta, etc.); o cualquier objeto con una
pantalla continua (un reloj de alarma, horno, microondas, VCR o cafetera con un
reloj digital).
Las computadoras portátiles, tablets, computadoras de sobremesa, se encuentran
entre los peores “delincuentes fantasmas”, con un promedio de 9 vatios y 44
vatios en modo “apagado”, respectivamente.
Dadas estas estadísticas, desconectar los dispositivos que no usas a menudo es una decisión valiosa para reducir tu factura de energía. También puede ayudarte configurar el modo de suspensión del ordenador o guardar un videojuego y a pagarlo en lugar de pausar, mientras te tomas un refrigerio. Estos simples cambios te pueden ahorrar más de 100€ al año en costos de energía.
Para tu comodidad puedes utilizar una regleta que elimine la necesidad de desconectar repetidamente los aparatos de la pared, lo que reduce el peligro de cables y cables deshilachados. De esta forma todos tus aparatos que no uses los puedes apagar a la vez.