A medida que nuestros veranos son cada vez más calurosos, la idea de instalar un sistema de aire acondicionado atrae cada año a muchos de nosotros. Si bien un buen aire acondicionado es ideal en tiempos de olas de calor, a menudo se le tilda de poco ecológico, consumidor de energía y responsable de la emisión de gases de efecto invernadero. Entonces, ¿tenemos que soportar el calor cuando queremos el bien del planeta? ¿Existen los llamados acondicionadores de aire «ecológicos» para enfriar una casa de una manera más eco-responsable?
El aire acondicionado y su impacto en el medio ambiente
Durante las olas de calor, el calor puede volverse insoportable o incluso peligroso muy rápidamente, especialmente para las personas mayores o frágiles. La climatización se convierte así no sólo en un equipamiento de confort, sino sobre todo en una herramienta imprescindible para garantizar el bienestar de todos los ocupantes de tu hogar. Desafortunadamente, los sistemas de aire acondicionado a menudo son criticados por su impacto ecológico.
En primer lugar, los sistemas de aire acondicionado consumen mucha energía. En verano vemos cada vez más picos en el consumo eléctrico vinculados al uso de aires acondicionados, con los que cada vez se equipan más hogares, con consecuencias directas para nuestro medio ambiente y nuestro bolsillo. Se estima, en concreto, que climatizar una habitación de 45 m2 puede aumentar la factura eléctrica entre un 20 y un 25%.
En segundo lugar, los acondicionadores de aire son una de las fuentes antropogénicas de islas de calor urbanas que provocan la transformación de fenómenos meteorológicos, como la aparición de violentas tormentas. De hecho, ya en 2012, según las últimas investigaciones, la temperatura de las calles de ciertas ciudades ha aumentó 0,5°C debido al uso de acondicionadores de aire. ¡Y si las emisiones de calor residual de los acondicionadores de aire se duplicarán, la temperatura de las calles aumentaría en 2°C!
Finalmente, el último, pero no el menos importante, punto débil de los acondicionadores de aire: los refrigerantes que contienen. Estos son a veces poderosos gases de efecto invernadero y contribuyen activamente al calentamiento global o son contaminantes para el suelo y el agua. En teoría, deberían permanecer confinados dentro del sistema, pero siempre terminan escapando de él, en particular debido a la falta de mantenimiento.
Aire acondicionado respetuoso con el medio ambiente
Afortunadamente para aquellos que no piensan prescindir del aire acondicionado en verano, los sistemas de aire acondicionado han avanzado mucho en los últimos tiempos. En particular, se han prohibido los clorofluorocarbonos (CFC), responsables de la formación de agujeros en la capa de ozono, y ahora se utilizan otros gases refrigerantes, más respetuosos con el medio ambiente. Los acondicionadores de aire que funcionan únicamente con electricidad están dando paso gradualmente a las bombas de calor aire-aire, que consumen mucha menos energía. También ten en cuenta que una bomba de calor es un acondicionador de aire reversible que se puede usar como un calentador auxiliar para ahorrar aún más energía.
Pero si el desarrollo sostenible está ahora en la lista de preocupaciones de los fabricantes, los consumidores también tienen algo que decir, adoptando, por ejemplo, acciones sencillas para hacer rimar la climatización y la ecología. Para mantener tu hogar fresco durante el mayor tiempo posible, recuerda:
- Cerrar las persianas durante el día y usar persianas exteriores, 10 veces más efectivas que las persianas interiores.
- Ventilar por la noche y temprano por la mañana, creando corrientes de aire.
- Reducir al máximo las fuentes de calor internas (optar por bombillas LED que se calientan menos, evitar usar el horno durante las olas de calor, etc.).
- Usar un ventilador como método de enfriamiento adicional.
También es recomendable realizar un mantenimiento periódico de tu equipo de aire acondicionado para asegurarte de que es hermético y funciona correctamente. Y es mejor evitar diferencias demasiado grandes entre la temperatura exterior e interior. Bajo un uso razonable, se recomienda una diferencia de 5 a 7 grados entre los dos.
Si quieres ir más allá, o incluso acometer determinadas obras, recuerda que un buen aislamiento es la clave del confort térmico. Si vives en un ático, por ejemplo, en gran parte estas expuesto a la ganancia de calor, debes estar bien protegido si no deseas que tu hogar se sobrecaliente. Aislar las paredes de tu casa o instalar ventanas de control solar orientadas al sur también puede ser una buena idea.
Alternativas ecológicas al aire acondicionado convencional
Los acondicionadores de aire ecológicos existen. Aquí hay algunos que podrían ser adecuados para ti:
- El bioclimatizador, o enfriador de aire evaporativo (RAE), se basa en el principio de la evaporación y permite obtener un descenso de 2 a 4°C con respecto a la temperatura exterior. Este sistema consume mucha menos energía que un acondicionador de aire móvil clásico y es más eficiente que un ventilador.
- La climatización solar está especialmente indicada para viviendas que ya disponen de placas solares, porque permite aprovechar la energía renovable y gratuita, la del sol. Además, los fluidos utilizados no tienen impacto ambiental.
- El intercambiador aire-tierra, también llamado pozo canadiense o pozo provenzal, se puede utilizar para enfriar el aire de tu hogar, pero también para calentarlo, dependiendo de las temperaturas exteriores. Basado en el principio de la energía geotérmica, este aparato hace pasar el aire exterior a través de conductos enterrados en el suelo para refrigerarlo, y está especialmente indicado para viviendas de muy bajo consumo.
- El muro verde es especialmente útil para combatir las islas de calor en las grandes ciudades. Actuando como capa protectora de la fachada, regula la temperatura interior en verano e invierno. ¡Durante los períodos de mucho calor, puede bajar la temperatura en 10°C! Por otro lado, su costosa instalación requiere la intervención de un profesional y su vida útil es de 10 años de media. ¡Una solución que no se adapta a todos los presupuestos!
- Reducir el consumo energético y hacer rimar climatización y ecología es posible. Pero para eso es necesario elegir un aire acondicionado adaptado a tus necesidades y sobre todo adoptar una vida eco-responsable, integrando en tus hábitos de gestos por el planeta.
Recuerda
Para lograr combinar climatización y ecología, ciertos gestos deben volverse automáticos:
- Ventilar por la mañana y por la noche.
- Durante períodos de mucho calor, usa menos aparatos que produzcan mucho calor.
- Realizar el mantenimiento del sistema de aire acondicionado para evitar que libere demasiadas sustancias nocivas.
- Integra sistemas de sustitución además de tu aire acondicionado convencional.